Segun comenta Adarraga, “La progresión durante toda la semana ha sido muy buena.". El corredor se clasificó noveno en la primera manga, y a punto estuvo de perder el pase a la final al acabar 15 en la semifinal, ya que solo los 15 mejores pasaban a la final. En la final conseguió recuperar el noveno puesto, "mi bajada no ha sido en absoluto perfecta. He sacrificado demasiados metros hasta establecer la trayectoria que me había propuesto" tal como reconoce el mismo esquiador, que admite que ha tardado bastante en colocarse en posición. Por lo tanto el resultado es bastante mejor de lo que en un primer momento esperaba Adarraga. "Es mi mejor resultado en una competición desde que comencé a correr en esquí de velocidad.”
El italiano Simone Origone demostró una vez más su dominio incontestable venciendo con un registro de 219,646 km/h, casi 1 kmh más que el segundo Bastien Montes (Francia) con 218,712 kmh. Tercero fue el suizo Philippe May con 217,785 kmh.
Copa del Mundo de Kilómetro Lanzado
Esta competición se celebra este año sobre la pista Chabrières de la estación francesa de Vars. Allí se han dado cita los corredores más rápidos del planeta, entre ellos el que ha ganado la actual edición, Simone Origone, que ostenta el récord de con 251,4km/h. Para comparar la tremenda velocidad a la que bajan estos corredores, hay que tener en cuenta que en la pista de Kitbuehel, una de las más rápidas de Copa del Mundo, se llegan a alcanzar registros de como máximo 140km/h.
El trazado de la pista permite no tomarse a broma esta carrera. La aceleración permite pasar de 0 a 200km/h en tan solo seis segundos, más rápido en un fórmula 1, según comentaba el Campeón del Mundo Junior, el francés Bastien Montes, poco antes de la carrera.
El punto de inicio de la pista está situado a 2.715 metros de altura, y tiene una pendiente del 98%. Solo los mejores están invitados a tirarse por ellas, entre ellos nuestro esquiador Ricardo Adarraga. Dicen quienes la han bajado, que hasta 210km/h se mantiene cierto control, pero que a partir de los 230km/h el agotamiento es máximo. A partir de ese punto se ha de ser un fiera, como Origone y sus 251,4km/h.
Apenas hay tres o cuatro pistas en el mundo capaces de acoger un récord del mundo de velocidad. En Francia, a parte de la de Vars, también encontramos la de Les Arcs. Además han de darse unas condiciones óptimas muy precisas, que hizo que por ejemplo Vars no pudiera organizar las últimas ediciones.
Una modalidad cara
Si difícil es bajar una de estas pistas, tampoco es nada barato. La cera para conseguir un record del mundo cuesta 600 euros, y solo da para una bajada. El casco aerodinámico unos 900 euros mas, y los esquís unos 750€ el par, y se utilizan unos 15 por temporada. Luego hay que contar viajes y entrenamientos en el túnel de viento, que también tiene un coste por hora. A eso hay que sumarle coste de los viajes, etc... La mayoría de federaciones apenas apoyan económicamente esta modalidad.
Respecto a los límites de velocidad que se pueden alcanzar, hace 20 años se pensaba que el tope estaba en 210km/h. Ahora ya se han superado los 250km/h...
Ricardo Adarraga
El corredor español, de 45 años, es madrileño, pero afincando en Alemania con su mujer y sus dos hijos. Lleva corriendo unos 10 años, y afirma que todavía no ha alcanzado su mejor estado de forma, así que probablemente le veremos hacer mejores registros en un futuro muy cercano.
La Federación Nacional española no contempla el Kilómetro Lanzado entre sus disciplinas, así que Adarraga corre por su cuenta representando a nuestro país, y es él el que corre con todos los gastos de material, viajes e inscripciones. Además de Adarraga, España ha tenido dos corredores más en esta modalidad, los también madrileños Fran de la Peña, que fue el pionero, y Robert Puente, retirado por una lesión en la rodilla.
Actualmente ostenta el record de velocidad de la especialidad en España, con 212,14km/h.
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